Antes de que la temporada de fresas termine aprovecha y sácale todo el partido a esta fruta tan rica como efímera. Para ello aquí encontrarás trucos, consejos y recomendaciones para que sepas cómo comprar y conservar las fresas y disfrutes siempre de la mejor calidad.
Lo primero que debes saber es que las fresas tienen 2 grandes enemigos: el calor y la humedad. Si a estos le añades el transporte, el resultado es un trío peligroso que hace que esta fruta pase de estar bien a estar inservible en cuestión de horas.
Todo empieza por una buena compra
Seguro que ya sabes que las fresas que vienen en cestas son más económicas pero no siempre son las mejores. Es preferible que las compres a granel, así puedes elegir las mejores y descartar aquellas que ya están pochas.
Reconocerás las mejores piezas porque tienen un color rojo brillante y llamativo. Tienen un olor fresco y característico que se reconoce al instante. Además los tallos son de color verde intenso.
Rechaza aquellas que tengan un color pálido o alguna parte verde o blanca. Y también aquellas que tengan los tallos parduzcos o apagados. Eso significa que no son frescas y lo más seguro es que, cuando llegues a casa, la mitad de la pieza ya estará inservible.
Si decides comprar las que ya vienen envasadas asegúrate de que las fresas no están amontonadas en el envase. Necesitan su propio espacio para no machacarse y estropearse.
Compra sólo aquellas que vayas a consumir en el día. Su composición, casi 90% agua, y su estructura delicada hacen que sea una fruta de difícil conservación. Así que no tires tu dinero a lo tonto y compra lo justo para disfrutar cada día de bocados llenos de sabor.
A la hora de llevarlas a casa, ponlas siempre encima de toda la compra, es decir, en la parte superior del carro o de la bolsa. Piensa que son aún más delicadas que los huevos.
Cuando llegues a casa…
Comprueba que todas las piezas están sanas. Si hay alguna que está dañada lo mejor es que la separes cuanto antes porque empezará a estropearse y puede que también deteriore al resto. Mi recomendación personal es que la laves, le retires la parte dañada y te la comas de un bocado. Es un castigo justo por no haberte fijado bien!! 😀
Tal y como te comentaba al principio, la humedad es uno de los enemigos principales de las fresas. Así que, evítala a toda costa y no las laves hasta que no las vayas a consumir.
Tampoco les quites los tallos. Se conservan mucho mejor las piezas enteras, con el tallo, que las troceadas.
No las manipules en exceso. Cuanto más las toques más calor les estarás dando y ya sabemos que hay que evitar las altas temperaturas porque no les va nada bien.
El mejor truco para conservarlas
Si has seguido las pautas anteriores estás a sólo un paso de convertirte en un experto en fresas y con este truco triunfarás seguro.
Es el turno de escoger bien el recipiente. Usa uno que sea amplio y que las paredes sean más altas que las fresas. No valen platos hondos porque hacen que las fresas se toquen unas con otras.
Forra el recipiente elegido con una capa de papel de cocina. Coloca las fresas boca abajo y ligeramente separadas unas de otras. Si se apoyan en el tallo no se machaca tanto y se conservan más tiempo.
Cubre el recipiente con film transparente procurando que no toquen las fresas. Con la punta de un cuchillo haz unos agujeros sin llegar a cortar las fresas. Así nos aseguramos de que están ventiladas y no se concentra la humedad.
Con este truco tendrás fresas perfectas durante 2 o 3 días para disfrutar de lo mejorcito de la primavera.
Nevera sí o nevera no
Las dos opciones son buenas siempre que tengas las ideas claras.
Cuando las fresas están a temperatura ambiente desprenden su mejor sabor y olor. Así que si te las vas a comer a las pocas horas no hace falta que las guardes en la nevera. Consérvalas en un sitio oscuro, fresco y ventilado.
Si las vas a consumir al día siguiente es mejor que las guardes en la nevera.
Recetas para disfrutar de las fresas
En Thermorecetas tenemos muchas recetas para que escojas la mejor manera de disfrutar de las fresas.
En batidos, zumos o smoothies. Te proponemos una colección de 9 recetas con diferentes combinaciones y texturas que se adaptan perfectamente a toda la familia.
Otra bebida deliciosa pero en versión salado es el gazpacho. Una opción perfecta para cuidarte y aligerar tu dieta.
Si eres fan del tiramisú no dejes de probar esta nueva versión. Más primaveral, más fresca y más jugosa.
También nos llega desde Italia esta deliciosa panna cotta de limón y fresas con una suave textura y agradable combinación de sabores.
Si quieres seguir disfrutando de las fresas durante todo el año, ahora es el mejor momento para lanzarte a preparar mermelada. Envásala correctamente y tendrás lista una deliciosa conserva casera.
Y si el calor aprieta, refréscate con un clásico del verano. El helado de fresa es tan fácil de hacer que incluso los pequeños podrán echarte una mano.
Hazle un hueco a tu congelador
Aprovecha ahora que están en su mejor momento, tanto en calidad como en precio, para congelar las fresas.
Lávalas, sécalas bien y quítales el tallo. Congélalas en una bandeja durante 2 horas y después guárdalas en un bolsa en el congelador.
Con ellas congeladas podrás preparar recetas exprés como smoothies y espumas.
Más información – Monográfico: los huevos / 9 bebidas con fresas / Gazpacho de fresas / Tarta tiramisú de fresas / Panna cotta de limón y fresas / Mermelada de fresas y naranja / Helado de fresas
Fotos –Farsai C. / Johnny Martínez on Unsplash