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No te pierdas estos bollitos tiernos para hacer tus mañanas muy saludables. Tienen su encanto, por su textura tierna y su relleno de nata con un toque dulce de azúcar.
Con nuestra Thermomix tenemos la facilidad de hacer este tipo de bollería. Con los tiempos de amasado, nuestras manos para darle forma y con los tiempos de reposo será perfecto para que tengamos unos pasteles muy esponjosos.
En el centro de cada bollo lo rellenaremos de un copete de nata montada y le espolvorearemos de azúcar granulada. El sabor de estos bollitos con todos sus ingredientes es espectacular.
Bollitos de nata y azúcar
Descubre estos blanditos bollos, con una textura perfecta y una sabor agradable gracias a su nata y un toque de fresa. ¡Te encantarán!
- Alicia Tomero
- Cocina: española
- Tipo de receta: desayuno
- Calorias: 175
- Raciones: 20
- Tiempo de preparado:
- Tiempo de cocinado:
- Tiempo total:
Ingredientes
Masa para los bollos
- 300 g de harina de trigo
- 15 g de levadura fresca de panadero (equivalente a 5 g de levadura seca de panadero)
- 30 g de azúcar
- 1 pizca de sal
- 2 huevos tamaño L
- 90 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 50 ml de leche entera
Relleno de los bollos
- 250 ml nata para montar fría
- 2 cucharadas de azúcar para la nata
- azúcar para decorar
Preparación
Comenzamos a realizar la masa. En nuestro vaso Thermomix echamos los ingredientes secos: los 300 g de harina de trigo, los 15 g de levadura fresca de panadero desmenuzada, los 30 g de azúcar y la pizca de sal. Mezclamos programando 5 segundos a velocidad 3.
Añadimos los 50 ml de leche entera y los 2 huevos. Volvemos a programar 4 minutos a velocidad de amasado.
Finalmente añadimos los 90 g de mantequilla blanda y volvemos a programar otros 4 minutos a velocidad de amasado.
Sacamos la masa del vaso y lo introducimos en un cuenco. Lo meteremos en el frigorífico durante 30 minutos para que repose.
Pasado el tiempo lo sacamos, lo cubrimos con un trapo húmedo y dejamos que eleve a temperatura ambiente durante 1 hora y media. Lo ideal es que la habitación dónde esté tenga una temperatura de 20° C, para cumplir con el tiempo de leudado. La masa tiene que duplicar su volumen, si ha pasado el tiempo y no lo ha hecho, hay que programar otro poco más de tiempo para que lo haga. Es fundamental respetar que se eleven, sino la masa quedará dura cuando se hornee.
En nuestro vaso Thermomix limpio colocamos la mariposa y echamos la nata para montar fría y una cucharada de azúcar. Batimos programando 40 segundos a velocidad 3,5. Tiene que quedar batida, pero no perfecto, no es necesario que esté completamente montada. Apartamos la nata.
Cuando tengamos la masa lista la colocaremos sobre una superficie ligeramente enharinada. Estiramos la masa con un rodillo, si es mucha la masa lo podemos hacer por partes. Cuando la estiremos tiene que quedar un grosor de 0,5 cm. Con un cortapastas redondo de unos 7 cm iremos formando los bollo, como si hiciéramos galletas.
Colocamos los bollos redondos sobre una bandeja que pueda ir al horno y las cubrimos con un trapo unos 30 minutos. Tienen que volver a duplicar su volumen.
Ponemos a calentar el horno a 200°. Pasado el tiempo de reposo haremos unas cavidades redondas en el centro del bollo con la ayuda del dedo. Metemos dentro una porción pequeña de nata y lo cubrimos todo con azúcar.
Lo metemos en el horno a media altura con calor arriba y abajo, durante 5 minutos. Después y sin sacarlos del horno lo bajamos a 150° y los horneamos unos 7 a 10 minutos más.
Quedan doraditos por fuera, super esponjosos y con un sabor espectacular.
