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Estos canelones de calabacín, champiñones y queso de cabra son muy fáciles de hacer y tan ricos que ni pensarás que están hecho a base de verduras.
Realmente son una alternativa fantástica si estás buscando recetas sin gluten o simplemente recetas más ligeras y digestivas que te ayuden a cuidarte pero sin que tengas que renunciar al sabor.
Además estos canelones de calabacín son una opción muy buena para incluir verduras en tu dieta porque, además del calabacín, están con champiñones, cebolla y tomate.
¿Quieres saber más cosas sobre estos canelones de calabacín, champiñones y queso de cabra?
Lo primero que tienes que saber de esta receta es que los canelones no son de pasta. Los hemos sustituido por unas finas láminas de calabacín que le dará un punto diferente y divertido a tu receta.
Estas láminas son muy fáciles de hacer sobre todo si tienes una mandolina en casa. Eso sí, por favor, ten mucho cuidado con ella y utiliza siempre el protector porque es fácil cortarse con sus afiladas cuchillas.
También las puedes hacer con un cuchilla grande bien afilado. Cuando veas lo fácil que es hacerlas y lo rica que está la receta, seguro que se te abre un mundo de posibilidades.
Estos canelones tampoco llevan carne, ni beicon, ni tan siquiera atún. Es una receta vegetariana hecha con una mezcla de verduras y queso de cabra que le da un punto de sabor delicioso.
Como te comentaba antes, esta receta es ideal para llevar una dieta equilibrada, con más verduras y más ligera.
Otro de los cambios importantes es que no lleva bechamel. De hecho no es la primera vez que los hacemos sin ella y te aseguro que no la echarás en falta.
En casa hemos aprovechado esta receta para hacer una cena sencilla y rica. Hemos servido una sopa de pollo de primer plato y, de segundo, estos canelones tan fáciles.
No hace falta que cocines las láminas durante mucho tiempo porque, al ser tan finas, con unos minutos en el varoma es más que suficiente. Así evitarás que se deshagan y te resultará más cómodo trabajar con ellas.
Esta receta es mejor tomarla recién hecha, caliente y con su queso derretido. Si no tienes mucho tiempo para hacerla en el momento, puedes dejar los canelones hechos, a falta de darles el golpe de calor y servirlos.
Se mantienen bien en la nevera durante, al menos, 2 días.
Aun no he probado a congelarlos pero creo que no tendrán ningún problema. Así que si te animas, déjanos un comentario con tu experiencia.
Canelones de calabacín, champiñones y queso de cabra
Unos canelones ricos y ligeros hechos sin pasta ni bechamel.
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Adapta esta receta a tu modelo de Thermomix