Pollo a la crema

Esta receta de pollo a la crema no puede ser ni más fácil, ni más rica. Te aconsejo que pongas lejos la barra del pan porque la salsa es una auténtica tentación.

Esta versión está sacada de una receta hecha con conejo a la que hemos sustituido el tipo de carne para hacerla más accesible y que toda la familia pueda tomarla sin problemas.

Es muy fácil de preparar solo tienes que pochar las verduras, dorar la carne y después cocerla. Y te aseguro que el resultado no te va a defraudar.

¿Quieres saber más cosas sobre esta receta de pollo a la crema?

Para hacer la crema o salsa el pollo se cuece en leche. Puedes usar la que más te guste, en mi caso he usado leche semidesnatada sin lactosa.

Si la haces con otro tipo de leche tendrás que ajustar los tiempos para que la salsa se espese a tu gusto. Pero no te preocupes porque al final de la receta te he puesto varios trucos que seguro que te ayudan.

Esta receta está hecha con contramuslos de pollo sin hueso y sin piel. Me gusta mucho este tipo de carne porque no es tan seca como la pechuga y no tiene huesos y los niños se lo comen fenomenal.

Yo suelo enrollarlos pero sin atarlos ni nada. Los enrollo sobre sí mismos y los coloco con cuidado alrededor de la mariposa. Así me aseguro que no se deshacen ni se quedan prendidos en la mariposa o en las cuchillas.

Para hacer esta receta puedes utilizar la pieza que más te guste. Eso sí, dependiendo del tamaño, tendrás que ajustar el tiempo. Si utilizas pollo troceado yo creo que con unos 25 minutos tendrás suficiente. Comprueba la carne para que no se cocine demasiado y se deshaga.

Para enharinarlo puedes utilizar el tipo de harina que más te guste. Yo he optado por un almidón de patata o de maíz que es apto para celíacos e intolerantes al gluten y que también ayuda a que la salsa se espese y quede perfecta.

Aprovecha para cocinar por niveles. En el paso 4 tendrás 35 minutos para hacer unas verduras o unas patatas en el varoma. También puedes hacer unos papillotes de fruta y así ya tendrás todo el menú listo.

Esta receta se conserva bien en la nevera durante 4 o 5 días. Guárdala en un recipiente limpio y ajustado a su volumen. Mantén siempre la cadena del frío y calienta solo aquella carne que se vaya a consumir.

También la puedes congelar, como máximo durante 3 meses. A la hora de utilizarla, ponla en la nevera para que se descongele y después ya la podrás calentar fácilmente con tu método favorito.

Truco para espesar una salsa

Tal y como te he comentado, dependiendo del tipo de leche que utilices la salsa te quedará con texturas diferentes. En el caso de que utilices leche entera la salsa te quedará más espesa e igual no te hace falta espesarla pero, en cambio, si es desnatada te quedará más suelta.

Si la salsa te ha quedado muy líquida y la quieres con más cuerpo solo tienes que programar unos minutos, a 100º, velocidad 2 y sin el cubilete para facilitar la evaporación.

En el modelo TM6 puedes activar la función espesar salsas, es una de las ventajas del nuevo modelo que facilita el cocinado.

En cualquier caso, como el pollo ya está enharinado con almidón, la salsa se espesará sin problemas.

Si por alguna razón la salsa no termina de tener el punto que tú quieres puedes añadirle un extra de almidón. En ese caso, pon un poco de agua en el cubilete y disuelve una cucharada de postre de almidón de patata o de maíz. Vierte la mezcla en el vaso y vuelve a calentarlo unos minutos, a 100º, velocidad 2, sin cubilete.

Te aconsejo que no subas la temperatura de 100º y que durante el espesado vigiles para que no se espese demasiado.

Más información – Conejo a la crema / Contramuslos de pollo al ajillo / Papillote de verduras y 5 salsas / Papillote de albaricoques

Adapta esta receta a tu modelo de Thermomix