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Una tarta de queso hecha con calabaza, es sencilla y deliciosa. Es una receta para aprovechar en estas fechas para poder disfrutar de la temporada de calabaza y no tenía que faltar incluso su pequeño sabor a canela. Es original porque está hecha de forma inversa pues tiene su base de galletas en la parte superior que después se ha decorado con un frosting de queso muy sencillo, que hará el toque final y jugoso a la tarta.
Tarta de queso con calabaza
Una tarta exquisita con una combinación perfecta de queso con calabaza. Para los amantes del cheesecake tenéis una combinación diferente hecha con el ingrediente estrella del otoño. Si la mezclamos con una base de galleta la convertiremos en ideal que ya sólo remataremos con una crema de mantequilla con queso para que resulte mucho más jugosa.
- Alicia Tomero
- Cocina: americana
- Tipo de receta: postre
- Raciones: 8
- Tiempo de preparado:
- Tiempo de cocinado:
- Tiempo total:
Ingredientes
Para la base de galleta
- 120g de galletas tipo digestive
- 50g de mantequilla derretida
Para la tarta
- 250g de calabaza
- 450g de crema de queso tipo Philadelphia
- 200g de azúcar
- 25g de harina
- 3 huevos
- 100ml de nata espesa
- una cucharada de extracto de vainilla
- dos cucharaditas de canela en polvo
Para la crema batida
- 200g de mantequilla a temperatura ambiente
- 150g crema de queso tipo Philadelphia
- 200g azúcar glass
- un puñado de nueces
- media cucharadita de canela para decorar
Preparación
Colocamos los 250g de calabaza en nuestro vaso de la Thermomix, lo vamos a cocer con un poco de agua. Lo programamos durante 30 minutos a temperatura varoma y a velocidad cuchara. Comprobamos que ha quedado bien cocida. Escurrimos el agua y hacemos puré la calabaza. Programamos 30 segundos a velocidad 3,5.
Sin limpiar el vaso añadimos los 450g de queso en crema, los 200g de azúcar y los 25g de harina. Lo batimos todo programando 1 minuto a velocidad 3.
Comprobamos que ha quedado bien batido, si han quedado restos en la parte superior de las paredes del vaso lo arrastramos con una espátula. Echamos los 100ml de nata, la cucharada del extracto de vainilla, las dos cucharaditas de canela molida y un huevo. Lo batimos todo programando 40 segundos a velocidad 3. Sin abrir la tapa vamos añadiendo por la boca los huevos restantes pero de uno en uno. Añadimos el segundo y programamos 40 segundos a velocidad 3 y añadimos el tercero programando los 40 segundos a velocidad 3. Apartamos nuestra crema una vez hecha y limpiamos el vaso.
Ponemos a calentar el horno a 180°. Para nuestra base de la tarta derretimos primeramente la mantequilla a baja potencia en un microondas alrededor de un minuto. Troceamos las galletas y las echaremos en nuestro vaso limpio de la Thermomix. Tapamos y las trituramos programando 30 segundos a velocidad 4. Añadimos finalmente la mantequilla, programamos 10 segundos a velocidad 3.
Preparamos un molde redondo de unos 20cm. En su base extendemos la galleta y formamos bien la base con las manos. Echamos por encima la crema de queso con calabaza que teníamos apartada. Escogemos otra fuente un poco más amplia que el molde y la llenamos de agua. Vamos a hornear la tarta al baño maría. Lo metemos al horno durante 40 minutos aproximadamente, hay que ir observando que ha quedado bien cuajada.
Para la crema de queso echamos en nuestro vaso limpio los 200g de mantequilla junto con 100g de azúcar glass. Lo programamos 1 minuto a velocidad 3,5. Echamos a continuación 150g de queso en crema y lo volvemos a mezclar durante 40 segundos a velocidad 3,5. Finalmente añadimos el resto de azúcar que son los otros 100g restantes. Lo mezclamos todo durante 1 minuto a velocidad 3,5.
Lo metemos en una manga pastelera con una boquilla ancha rizada para decorar la tarta. La tarta una vez horneada y fría la he volteado sobre un plato donde ha quedado al revés, con la base de galleta por encima. Para terminar la he decorado con la crema de mantequilla con queso y la he espolvoreado con la canela en polvo y decorado con trocitos de nueces. Es una tarta que está estupenda!
