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Es la receta perfecta. Si quieres probar a hacer esta maravilla te sorprenderá su sabor exquisito y suave con zanahoria y piña. El acompañamiento es ideal, con una excelente crema de queso y mantequilla que hará el mejor de los paladares.
Este bizcocho es muy fácil de hacer y tiene un sabor perfecto. Es muy jugoso y lleva un toque de canela que puede ser suprimido si no te gusta este tipo de sabor. El glaseado es una de las partes preferidas de este pastel, está hecho con un sabor a queso suave y avainillado, será el complemento perfecto.
Este tipo de postre se viralizó en Gran Bretaña y se extendió como uno de los postres favoritos de Estados Unidos. Fue una receta que se ideó en tiempos de hambre para poder escatimar en ingredientes, ya que eran muy costosos. Hoy en día hacer este tipo de bizcochos lo hace ser una receta deliciosa y que sin duda hay que probar.
Tarta de zanahoria y piña con crema de queso
Un postre riquísimo y delicioso con un bizcocho hecho con zanahoria y piña. Estará acompañado de una excelente crema de queso y mantequilla que hará de este postre el perfecto.
- Alicia Tomero
- Cocina: española
- Tipo de receta: postre
- Calorias: 350
- Raciones: 12-15
- Tiempo total:
Ingredientes
Para la tarta
- 200 g de zanahorias
- 150 g de piña en almíbar
- 325 g de harina de trigo
- 100 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 120 g de aceite de girasol
- 15 g de levadura seca en polvo
- 225 g de azúcar
- 2 cucharaditas de canela
- media cucharadita de sal
- 3 huevos
Crema de queso y mantequilla
- 300 g de crema de queso tipo Philadelphia
- 225 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 250 g de azúcar
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Preparación
Echamos en nuestro vaso Thermomix la zanahoria y la trituramos a 5 segundos a velocidad 5. A continuación agregamos la piña en almíbar y lo volvemos a programar durante 5 segundos a velocidad 4. Cogemos la mezcla y la apartamos, vamos a dejar nuestro vaso vacío, pero sin limpiar.
Echamos los huevos y los batimos durante 5 segundos a velocidad 5. Agregamos la mantequilla a temperatura ambiente y lo mezclamos durante 15 segundos a velocidad 4. Añadimos el aceite de girasol, el azúcar, la mitad de la harina, las dos cucharaditas de canela en polvo, la media cucharadita de sal y la levadura en polvo. Lo mezclamos todo programando 15 segundos a velocidad 4.
Añadimos la mezcla de la zanahoria pica junto con la piña y la otra mitad de la harina. Con la espátula o un cucharón removemos un poco la mezcla, tapamos y volvemos a mezclar durante 25 segundos a velocidad 4.
Ponemos a calentar el horno a 200° y preparamos una bandeja que pueda ir al horno. En mi caso he escogido una con las medidas de 23×23 cm y la he forrado de papel de horno para poder desmoldar mucho mejor el bizcocho. Echamos la mezcla que hemos preparado y lo horneamos alrededor de 40 minutos. La bandeja la he colocado a una altura media-baja del horno y a los 15 minutos la he cubierto con papel de aluminio para que no se haga demasiado por arriba.
Para la crema de queso y mantequilla: en nuestro vaso limpio añadimos el azúcar y lo vamos a pulverizar, programamos durante 10 segundos a velocidad 7. Sacamos y apartamos el azúcar. Añadimos en el vaso la mantequilla y la batimos durante 30 segundos a velocidad 3,5.
Añadimos el queso y el extracto de vainilla y lo volvemos a batir durante 30 segundos a velocidad 3,5. Echamos la mitad del azúcar y removemos un poco con la espátula, programamos 30 segundos a velocidad 3,5. Agregamos la otra mitad del azúcar y removemos otro poco con la espátula. Volvemos a programar otros 30 segundos a velocidad 3,5. La crema tiene que estar lista.
Con el bizcocho listo y enfriado lo partimos por la mitad. Lo vamos a rellenar del glaseado de queso, podemos echar la mitad y cuando lo cubramos de la otra parte del bizcocho lo cubriremos de la otra mitad de la crema de queso. Hacemos surcos con la cuchara para que quede una superficie adornada. Podemos adornarlo con nueces picadas.
En la receta falta el impulsor o levadura quimica